Dr. Albert Torras Rabasa

Albert Torras Rabasa

1945-2020

Tuvo una vida plena como médico, educador, compañero y, sobre todo, padre de familia. Hombre generoso, empático y con un gran sentido de la responsabilidad. Querido por sus colegas, fue distinguido con el premio a la Excelencia Profesional del CoMB en el año 2006. Los que te conocimos te añoraremos siempre y te mantendremos en nuestra memoria.

Miquel Bruguera Cortada, director de la Unidad de Estudios Académicos del CoMB

El día 27 de junio nos dejó Albert Torras, tras un año de luchar con gran estoicismo contra un cáncer de colon y sus metástasis.

La enfermedad y la muerte de Albert han sido un ejemplo de integridad y de dignidad. En ningún momento perdió el ánimo, nunca mostró su desilusión por el advenimiento de una enfermedad que no podría superar, tuvo ante su familia y sus amigos una actitud resistente, siguiendo activo hasta que la enfermedad no se lo permitió. De este modo se ha interrumpido una vida dedicada a la medicina y en la vida académica, entregada en el Hospital Clínico y en la Facultad de Medicina de la UB.

Albert Torras ha sido un hombre entusiasta, enérgico, entregado y sumamente responsable. Comienza la carrera en 1963. Cuando llega el período clínico, entra como alumno interno en la cátedra del profesor Soriano, donde coincide con su adjunto, el Dr. Revert, profesor adjunto de la cátedra, y un hombre de una personalidad carismática, que lo incorpora a su núcleo de discípulos, con los que creará el primer servicio de Nefrología del Hospital Clínico, en 1972, cuando se produce la transformación del Clínico en un hospital de especialidades.

Albert Torras no dejará nunca el servicio de Nefrología, donde llegará a ser consultor senior, habrá hecho una notable labor de investigación con un total de 90 artículos en revistas de impacto, y habrá hecho carrera académica, primero como profesor titular y después como catedrático de Medicina. Albert se siente comprometido con su Facultad de Medicina, y asume varias responsabilidades que ejercerá con dedicación y competencia.

Cuando le llega la edad de jubilación, sigue vinculado con el hospital y participa activamente en la creación de la Asociación de Médicos Jubilados del Clínico, en la que asumirá la función de secretario, organizando las actividades propias, haciendo de enlace con la dirección del hospital y creando una página web, que es una herramienta de cohesión entre los asociados.

Albert tuvo una vida plena como médico, como educador, como compañero y sobre todo como padre de familia. Ha sido un hombre generoso, empático y con un alto sentido de la responsabilidad. Estimado por sus colegas, fue distinguido con el premio a la Excelencia Profesional del CoMB en 2006.

Los que te hemos conocido te echaremos siempre y te mantendremos en nuestra memoria.